¿Cómo actuar si alguien sufre un desbordamiento emocional?

Llamamos desbordamiento emocional al momento en el que una persona comienza a experimentar sensaciones tan intensas que la paralizan y “secuestran” a la persona teniéndo grandes dificultades para calmarse.

El desbordamiento emocional puede llegar a ser un momento abrumador para cualquier persona pero podemos desplegar diversas acciones para ayudarles a recuperar la calma. Manteniendo la tranquilidad y haciéndoles saber que no están solos, se consigue crear un espacio de co-regulación que facilita la autorregulación de sus emociones.

A veces, las emociones se experimentan tan intensamente que parece que nos va a dar un ataque de ansiedad, pero podemos conseguir que tal desbordamiento no llegue a hacer que perdamos el control de esa forma.

A continuación te contamos algunas de las acciones que los psicólogos utilizamos en sesión cuando alguno de nuestros pacientes sufre un desbordamiento emocional y necesitamos ayudarles a salir de este estado. Pero dichas acciones no tienen porque ser realizadas exclusivamente por un profesional, también son útiles para personas que, sin ser profesionales de la psicología, quieren ayudar a alguna persona o ser querido que esté experimentando dicho desbordamiento o esté experimentando emociones extremadamente intensas.

Ante un desbordamiento emocional o emociones intensas:

– Intenta mantener la calma y hacerle saber a la persona que lo está experimentando que no está sola. Las personas aprendemos a gestionar nuestros estados internos por co-regulación. Si tú mantienes un estado de calma y tu sistema nervioso está tranquilo ayudarás a que el sistema nervioso de la otra persona pueda regularse también.

– Ayuda a la persona a tomar conciencia de la realidad para que pueda distanciarse de su experiencia interna de angustia. Pregúntale datos como su número de teléfono, pídele que describa un objeto de la habitación, que pise descalzo el suelo notando la sensación en sus pies, que tome tu mano mientras ejerces una ligera presión, que tome contacto visual contigo y respire a la vez que tú.

– Intenta reducir la intensidad de la emoción. Utiliza técnicas de respiración, de relajación o enraizamiento al presente que ayuden a la persona a rebajar revoluciones y a poder tolerar lo que sea que esté sintiendo desde un estado más relajado o, al menos, menos reactivo o hiperactivado.

– Ayúdale a “liberar” la tensión acumulada por lo que está experimentando. Invítale a levantarse y andar por la habitación, hacer ligeros movimientos o estiramientos, dar pequeños saltos sobre sus pies o sacudir los brazos y piernas. Esto hará que la tensión se reduzca y que el cuerpo esté más receptivo a poder sentir otro tipo de sensaciones menos desbordantes.

– Recuérdale dónde está y que estás ahí con él/ella, que en este preciso momento no hay peligro, que está en un lugar seguro. Hazle saber que lo que está sintiendo pasará, que solo hay que darle un poco de tiempo a que el sistema pueda resetearse.

Acompañar bien a alguien que está desbordado emocionalmente es complicado.

Es importante no invalidar la experiencia de la persona, ya que a veces cuando evaluamos desde fuera las emociones o situaciones que han provocado el desbordamiento no parecen tan horribles y se pueden llegar a minimizar. Pero cuidado, porque para la persona sí está siendo abrumador, por lo que no hay que quitarle hierro, ni minimizar su malestar o decirle que «no es para tanto». En ese momento para esa persona sí lo está siento y necesita de nuestro acompañamiento libre de juicio.